“El hombre que no ha pasado por circunstancias adversas, realmente no se conoce” (Viktor E. Frankl.

La persona que dijo ésta frase realmente sabía de lo que hablaba, ya que estuvo nada menos que tres años prisionero  en diversos campos de concentración nazis, entre ellos los tristemente famosos de Auschwitz y Dachau.

En ellos descubrió que había personas fuertes que morían al poco tiempo y personas aparentemente débiles aguantaban hasta límites insospechados.

Se preguntaba una y otra vez qué era lo que les ayudaba a seguir viviendo y, con su formación de psiquiatra, descubrió que lo que más impulsa a una persona a vivir es tener algo por lo que hacerlo, tener un motivo.

Si nos centramos en el tema que nos ocupa, veremos que la resiliencia va un paso más allá.

Se trata de un tema de investigación para la Psicología que pretende ver qué le sucede a las personas cuando se enfrentan a una situación que pone al límite la capacidad de sobrevivir de la persona.

Para investigarla, se ha estudiado a náufragos, supervivientes de catástrofes naturales, soldados en campos de batalla, prisioneros de campos de concentración,…

Hoy en día se ha dado un paso más y lo que se investiga es cómo hay personas que crecen y se hacen cada vez más fuertes en épocas difíciles.

Esas investigaciones dan conclusiones realmente interesantes. Han generado una serie de conocimientos y reglas que se pueden aprender. Nos ayudarán no sólo a superar dificultades, sino también a crecer mientras lo hacemos.

De ellas hablaremos en sucesivos artículos, ya que siempre nos vendrán bien cuando las cosas vengan mal dadas.

Por cierto, el psiquiatra que he citado al principio escribió un librito con sus experiencias. Te lo recomiendo totalmente. El título es “El hombre en busca de sentido”.

PREGUNTA: ¿Cómo reaccionas cuando las cosas se ponen feas?.